· Aceite de Macadamia: Su composición es especialmente rica en ácidos oleicos, linoleico y esteroles, lo que le confiere propiedades 

suavizantes y calmantes. Es un aceite fino, fluido y ligero, que aporta los elementos nutritivos necesarios para conservar la piel luminosa y sana.

Actúa como antioxidante y previene el deterioro de las membranas celulares. Es un lubricante de la piel, de fácil absorción y útil en casos de quemaduras por el Sol y en la curación de heridas.

· Vitamina F: La principal función de esta vitamina es reparar y crear tejidos en el cuerpo. Está recomendada para tratar problemas de sequedad de la piel, eccemas y cicatrización.

· Aceite de Jojoba: Actúa como emoliente formando una película sobre la piel, evitando la eliminación de agua y favoreciendo su hidratación. 

· Cera de Abejas: Aporta protección debido a su carácter altamente hidrófobo. Repele el agua, forma una película sobre la piel y la 

impermeabiliza, dándole consistencia y protección frente a la acción de agentes externos que pueden dañar la piel. Tiene propiedades antiinflamatorias y cicatrizantes.

· Manteca de Cacao: Rica en compuestos antioxidantes, hidrata la piel y la protege frente a agentes externos. 

· Alantoína: Acelera la cicatrización de heridas y la regeneración cutánea.

· Aloe Vera 20%: Estimula el crecimiento celular y la cicatrización. Hidrata y suaviza la piel.

· Aceite de Cártamo: Ayuda a rejuvenecer la piel dañada para que la piel seca se vuelva suave, hidratada y saludable.